domingo, 23 de octubre de 2011

Hilo de los días

«Ya ves, continuamos viviendo, cada uno a su manera, incluso ahora», pensé. Por profunda y falta que sea la pérdida, por importante que sea lo que nos han arrancado de las manos, aunque nos hayamos convertido en alguien completamente distinto y sólo conservemos, de lo que antes éramos, una fina capa de piel, a pesar de todo, podemos continuar viviendo, así, en silencio. Podemos alargar la mano e ir tirando del hilo de los días que nos han destinado, ir dejándolos luego atrás. En forma de trabajo rutinario, el trabajo de todos los días..., haciendo, según cómo, una buena actuación. 

Haruki Murakami
Sputnik, mi amor

viernes, 14 de octubre de 2011

Al perder a Sumire, muchas cosas murieron en mi interior. De la misma forma que desaparecen muchas cosas de la playa cuando se retira la marea. Lo único que me ha quedado es un mundo deforme y vacío. Un mundo frío y tenebroso. Las cosas que surgieron entre Sumire y yo jamás podrán renacer en ese nuevo mundo. Soy consciente de ello.


En la vida de las personas hay una cosa especial que solo puede tenerse en una época especial. Es como una pequeña llama. Las personas precavidas y con suerta la preservan con todo cuidado, la hacen crecer, la llevan como una antorcha que ilumine sus vidas. Pero, una vez se pierde esa llama no puede volver a recuperarse jamás. Yo no solo he perdido a Sumire. Junto a ella tambien he perdido esa preciada llama.


Haruki Murakami
Sputnik, mi amor 

domingo, 18 de septiembre de 2011

Sobre dioses y pozos


Que sabes tu del corazón de Job, Nada, pero se todo del mío y algo del tuyo respondio Cain. No creo, los dioses son como pozo sin fondo, si te asomas a ellos ni siquiera conseguiras ver tu imagen, Con el tiempo todos los pozos acaban secandose, tu hora tambien ha de llegar. 

Cain
José Saramago 

sábado, 3 de septiembre de 2011

Adios Agosto, adios

En diferentes momentos de este par de días he estado ante una página en blanco esperando que las palabras fluyan para este post del cual solo tenía claro el título. Escribi, borre, no lo conseguí, me he rendido, no hay palabras, solo diré de nuevo. Adios agosto, adios. Quizá seas la última vuelta de la montaña rusa, quizá no.