viernes, 9 de octubre de 2009

No te preocupes, Yo Pago. (Actualizado)

Uno de estos dias mientras disfrutaba de una comida casera muy rica charlaba con 2 amigos sobre un tema que vale la pena el post. Ella nos contaba que un tipo francés que la invito a salir una vez le dijo textualmente cuanto le tocaba pagar de la cuenta, era algo asi como: "Tu pagas los cafés y yo los postres ok?". Estarán de acuerdo conmigo que aunque fue algo justo si fue algo fuera de lo "convencional" y quizá hasta un poco rudo para cualquier chica.

La opinión masculina de la plática comentaba que algunos de sus amigos no tenían una relación por el hecho de lo "caro" que resultaba salir con alguien, esto último me pareció realmente lamentable, recuerdo que en algunas de las mejores citas que he tenido no fue tan necesario gastar tanto, asi que espero que estas opiniones sean aisladas, resultado de solo malas experiencias por frivolidades mal llevadas.

Y es que a pesar de este rollo de liberación femenina (con el que no siempre estoy de acuerdo) y la igualdad de condiciones para hombres y mujeres, no podemos negar que aún existe este "tabú" sobre quien paga las citas. La costumbre, al menos de nuestra sociedad, dice que si un caballero invita a salir a una dama entonces como todo caballero (valga la redundancia) le corresponde correr con los gastos de la cita y nosotras como todas unas damas nos dejamos apapachar y que nos lleven a donde su economía se los permita. Les cedemos la compañia, el espacio y el control, por eso cuando contestamos -"a donde tu quieras" o "lo que tu quieras" no es falta de inventiva o decisión, es mas bien que no pretendemos abusar del signo de pesos...

Todavía las cuestiones de dinero no son un tema fácil entre parejas, no es algo de lo que comúnmente se hable y mucho menos si se trata de plan de conquista. En esta vida consumista que llevamos tener una cita ya no es algo muy barato que digamos, quizá nuestros abuelos solo necesitaban pagar un helado, hoy en una ciudad mediana, una cita promedio tiene dos ceros a la izquierda, no dudo que para muchos sea poco, pero para la mayoría si representa una cantidad digna de considerar.

Después de nuestro intercambio de ideas y experiencias, llegamos a la no muy díficil y obvia conclusión de que la o las primeras citas generalmente si corren por galanteria a cuenta del hombre, es una manera de continuar con las viejas prácticas y los roles que todavía conservamos en pleno siglo XXI. Y es que por muy siglo XXI a los hombres aún les parece importante tener ese papel de "el que provee", les da libertad, confianza y seguridad y a las mujeres aún nos hace sentir bien jugar el papel contrario. Después de un rato, si las citas se siguen dando, con cierto nivel de confianza y cuando el caballero en cuestión se relaja y cede el control sin sentirse menos caballero, entonces es posible llegar a un acuerdo sobre cuanto desembolsa cada quien para divertirse a gusto sin desfalcarse. Finalmente el momento es de dos, la diversión es para dos, se me hace apropiado dividir el gasto entre dos, el porcentaje es cuestión de cada quién, de la situación y del bolsillo.

En lo personal, yo agradezco cuando un chico se toma la molestia de invitarme, pagar una cita y todavia ofenderse (o hacerse el ofendido) cuando me ofrezco a pagar algo, cliché, costumbre, machismo o lo que sea, es algo que aprecio (y que todas las mujeres debemos apreciar) porque en esta vida q nos tocó vivir ganarse el dinero cuesta y que te hagan sentir consentida por un rato se agradece. También me es grato cuando alguien se pone imaginativo y me da un momento fuera de lo normal en el que no siempre el dinero es el factor mas importante...con un poco de imaginación y empatía pasarsela bien en una cita no necesariamente significa quedarse quebrado.

Actualización 12Oct09

Creo que me hizo falta recalcar en el post que yo si estoy a favor de dividir el gasto de una cita...De tener acuerdos como y de aplicar el "hoy yo invito"... Que sé por experiencia que ganarse el dinero no es fácil y además tengo un hermano por lo que se lo complicado que resulta ser hombre en plan de conquista. Solo agradecía las atenciones, ya que hasta el hombre mas patán con el que he salido nunca me ha dejado pagar nada la primera cita (no es pedrada para los patanes, pueden seguir siéndolo mientras alguien los aguante), y que finalmente con confianza y comunicación todo resulta bien en el plan económico.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajaja... es injusto k nosotros sigamos pagando todo.. pero tambien stoy d acuerdo k en las primeras citas asi debe d ser para dar buena impresion jejejeje..

La que soy hoy dijo...

Pero si yo no digo q los hombres tienen que pagar todo...Digo q se les agradece y que despues de eso ya hay tratos de "50 50" por ejemplo o de "ahora me toca a mi"

Refoc dijo...

(nosecomolleguéaquí)

soy mujer y tengo dos hermanos mayores, que siempre gastaban todo su dinero en chavitas y yo me molestaba.
Ahora me siento un poco incómoda cuando mi novio o alguien me regala cosas, me paga todo y ese tipo de cosas.
Y sí, en efecto, esto de la igualdad de géneros se da mucho en conveniencia. "somos iguales ante todo, pero como soy mujer, págame todo."
Cuando puedo y "nace de mí", me gusta pagar el cafecin, el helado, el transporte y a veces hasta el cine, y no me parece mal.
creo que sí depende de la confianza que haya en la relación, y las mujeres ponernos un poquito en el lugar de los hombres, porque sí es algo carito, y más con crisis y todo este desastre.
claro, que siempre hay mucho que hacer con muy poco dinero y hasta más divertido.
en fin =)

Julio dijo...

ps al principio se me hizo algo raro, escuchar eso y hasta tedioso saber que mucho hablan sobre igualdad pero con un toke de "control machista"

aunqeu al final en tu conclucion estoy de acuerdo.....
no hay ke olvidar que el ser cortez no indica ser Machista o si??....(habrá que ver)

pero bueno, como dics.: que con algo de imaginacion pueds pasartela chido sin necesidad d gastar exageradamente(aunqe claro cuando uno anda "enamorado" NADA es exagerado)

Anónimo dijo...

Pues yo puedo decirte que desde la primera cita ella paga. El asunto es que ella trabaja y yo soy estudiante de tiempo completo. Así que ni como ayudar en la cuenta.

Verquiel dijo...

... ceros a la izquierda?... mas bien a la derecha... en fin...

La verdad estoy en una situación similar, y solo en una ocasión me apendejé (estaba distraido), y la chica con quien salgo se pasó de lista y pagó su consumo en el cine (esta de más decir que las entradas y el resto corrió por mi cuenta).

La verdad, en ocasiones si es algo costoso, yo salgo con la chica en cuestión un promedio de una vez por semana (pues no somos novios aún) y si ha ido en aumento la calidad y el costo de los lugares a los que la invito.

Sin embargo, es porque quiero hacer de cada salida algo especial (y no digo que para ello se requiera invertir demasiado, sino que la relación es cada vez más formal e íntima), que dejo el factor económico a un lado, pues no me gusta "cuantificar" esos momentos tan lindos.

En lo personal, prefiero que la dama elija el lugar y eso, ya que yo le doy más importancia al hecho de estar con ella, y como sabemos las mujeres por lo general son mas atentas a detalles, lugares, etc. Por eso, si ella se siente bien y a gusto, pues yo también. Prefiero que ella sea feliz.

Otro punto, que creo que no cubriste demasiado, es que en ocasiones uno como hombre puede llegar a pensar que la dama determina nuestra valía o nivel de compromiso en términos de lo "espléndido" que uno sea en esas ocasiones.

El hecho de que seamos hombres no significa que no nos preocupe lo que nuestra compañera piense de nosotros, y por ello en ocasiones, ser el que paga todo y gastar en pequeños (y no tan pequeños) detalles es una forma de tratar de ganar su aprobación, por temor tal vez a quedar mal o muy "valemadrista".

Se que el párrafo anterior puede sonar muy retrógrado, por aquello de querer conquistar con billete y/o estatus, tal vez hice alusión a la inseguridad masculina, o insinuaciones a que las mujeres solo se interesan en esos factore$$$. Pero la verdad es que son situaciones que aun se dan, y seguirán sucediendo.

Mi conclusión personal, y por experiencia propia, es que tomo esto de pagar y de más, como un gesto de caballerosidad, sencillamente para que la velada (o lo que sea) se centre en lo que es realmente importante: estar con la persona que quiero.